Durante el foro “Eldorado: Retos y Oportunidades”, organizado por el Ministerio de Transporte, la Aeronáutica Civil, ATAC, OPAIN S.A., El Tiempo Casa Editorial y la Cámara de Comercio de Bogotá, esta entidad hizo algunas recomendaciones frente al desarrollo del entorno y a las obras de ampliación del Aeropuerto Eldorado.

El Aeropuerto es la obra de infraestructura más importante de la ciudad, la región y el país, dado que a través de esta Terminal en el año 2012 se movilizaron cerca de 24 millones de pasajeros y 700 mil toneladas de carga, además ocupa el primer lugar en movimiento de carga y el tercero en movimiento de pasajeros en América Latina.

Para la CCB es necesario avanzar en la planificación urbano – regional del entorno del aeropuerto de manera concertada entre los tres niveles de gobierno (nacional, departamental y distrital), con el fin de consolidar una nueva plataforma urbana que permita la localización de empresas, industrias y servicios complementarios a la actividad aeroportuaria.

También considera fundamental conectar el aeropuerto Eldorado con la ciudad y la región a través de la consolidación de un sistema de anillos (vías principales que bordeen el sector) y conectantes viales que permitan facilitar el transporte de carga y pasajeros desde y hacia el aeropuerto, y en sentido oriente – occidente y norte – sur, con proyectos viales como: la Avenida José Celestino Mutis y la Avenida el Ferrocarril hasta la Transversal de la Sabana y la Avenida Longitudinal de Occidente, y la vía cerritos – la Florida desde la Calle 13 hasta la Calle 80.

Así mismo, la entidad recomienda a la Aeronáutica Civil dar celeridad a la construcción de la torre de control para que OPAIN pueda finalizar las obras de demolición de la antigua terminal de pasajeros y la construcción de la plataforma interior y puentes de abordaje en la fecha establecida en el contrato, es decir, el 31 de julio del 2014.

La Cámara de Comercio de Bogotá realizó en el mes de octubre de 2013 la encuesta de percepción de los usuarios del aeropuerto, e invitó a las autoridades que intervienen en el buen funcionamiento de la terminal aérea y a todos los asistentes, a estar muy atentos a los resultados que se presentaran en las próximos días, dado que la calidad del servicio a los usuarios es uno de los retos más importantes para la competitividad del Aeropuerto.

El nuevo edificio cuenta con 174.000 metros cuadrados (65.000 en la zona nacional), tres veces más grande que el viejo aeropuerto, que se construyó en 1959. De los 18.000 metros cuadrados de comercio que hay en total, unos 13.000 estarán en el área nacional.

La demolición de la antigua estructura empezará este mes y terminará en abril del próximo año, cuando la firma española Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) entregue la nueva torre de control.