“Dale una Mano al Transmilenio” es una actividad convocado por la Federación Comunal y las Juntas de Acción Comunal.

El evento se realiza en la estación de la Avenida Caracas con calle 72, donde se registraron los mayores desmanes el viernes pasado durante las protestas ciudadanas que terminaron en vandalismo.

La actividad, está siendo apoyada por la subdirección de Asuntos Comunales del IDPAC, para rechazar el vandalismo y convocar a la creación de Comités de veeduría y control  por parte de los ciudadanos para analizar el tema en profundidad y proponer soluciones a los problemas que enfrenta el sistema de transporte público de Bogotá.

Las consignas son las siguientes:

-Dale una mano al Transmilenio y una opinión a su democratización.
-El bien público se preserva
-Vamos a deliberar, concertar y decidir su democratización.

La convocatoria se ha extendido a todos los comunales de Bogotá, dignatarias, dignatarios, afiliadas, afiliados y lideresas y líderes comunitarios

El hecho se da en medio de una crisis del sistema de transporte masivo más importante de la ciudad y cuando la administración de la ciudad anunciara el que sería el plan de choque para afrontar la situación que tiene dos medidas de choque: más vías libres y más buses en horas pico.

La primera medida consiste en dejar a un lado una práctica conocida como el ‘2 por 1’ en los cruces, en donde la Policía de Tránsito le permitía pasar dos semáforos en verde a los carros particulares. Ahora, la prioridad será para los buses rojos.

La prueba también evalúa la posibilidad de que uniformados le den paso prioritario a los articulados cuando se registren represamientos.

Más buses en horas pico

Otra medida se aplicará en las 32 estaciones de mayor demanda en horas pico. Empleados en la vía revisarán, por ejemplo, el flujo de pasajeros en estas, y a través de las cámaras, para determinar si se envían buses vacíos que permitan desalojar, en una pasada, entre 150 y 200 personas en un solo punto.

De otro lado, en una mesa de trabajo convocada por el programa ‘Bogotá, cómo vamos’ (BCV), varios expertos señalaron que al simplificar las rutas se descongestionan estaciones y troncales.

«El sistema cuenta con 120 rutas diferentes con recorridos parecidos; por tanto, cada estación puede recibir entre 30 y 50 rutas que muchas veces no completan su capacidad, pero sí originan trancones», fue una de las conclusiones.