En Sanandresito, renombrado sector de bodegas de mercancías, se encuentra cualquier cosa: desde las gafas para el sol, el último zapato de moda o el perfume más costoso, hasta celulares clonados, armas de fuego o la pólvora navideña prohibida por la Alcaldía.

En este palacio del comercio se puede hallar cualquier cosa, hasta la muerte… De esto podrá dar fe Wilson Tenorio, un «avispado» pero no por ello menos espontáneo agente de policía que se mueve como pez en el agua en este lugar. Tenorio anhela un ascenso en su institución, en tener una mejor vida, pero no está dispuesto a mover un dedo para lograrlo. Las cosas están por cambiar cuando se ve enredado en el asesinato de una muchacha de Sanandresito, cuyo cadáver aparece en la camioneta oficial que conduce Tenorio.

El vanidoso e inútil agente Tenorio deberá por primera vez en su vida poner en práctica lo, supuestamente, aprendido en su instrucción policial. Sin más ayuda que su propia malicia indígena deberá descubrir al verdadero asesino, antes de que lo capturen la policía, a cargo de su propia novia, la Sargento Fanny; y antes de que Félix, el peligroso escolta enceguecido por el dolor, lo encuentre y erróneamente cobre venganza sobre él. ¿Qué pasará primero?

Sanandresito es una historia en tono de comedia negra, y además una buena excusa para vernos retratados en una de nuestras características más profundas: la corrupción. Nuestra ética elástica, nuestra moral de bolsillo ha marcado desde antaño nuestra idiosincrasia y nos ha llevado por generaciones a Sanandresito.

La suerte del feo la desean los bonitos: Agente Tenorio, el peor policía de la institución. Tenorio es el policía más popular en todo Sanandresito. Su simpatía y encanto hacen que todos lo reconozcan en las bodegas, y aunque no es el más esbelto, el verde oliva de su uniforme la va muy bien con su contextura y le da un aspecto de mercenario gringo, junto con las gafas Ray Ban made in china que se levanta en este lugar. A veces puede resultar un poco intimidante para las chicas que atienden las diferentes vitrinas y para algunos vendedores, pero no se sabe si es por su look o por la inconciencia que lo acompaña.

Tenorio es la acumulación de triunfos conseguidos sobre el vacío, logros alcanzados a pesar de cualquier pronóstico en su contra. Es, en una sola persona, el reflejo de lo que somos muchos colombianos, individuos carismáticos esperando ansiosos el día en el que se resuelva nuestra suerte y tengamos lo que creemos merecer después de tanto esperar sin hacer mucho. Es esa necesidad de alardear sobre lo que tenemos, lo que hacemos y lo que dejamos de hacer.

El agente de policía tendrá que poner a prueba su valentía, de la que tanto alardea pero de la que carece, para resolver el misterio que hay alrededor de la muerte de una linda vendedora de Sanandresito, quien aparece accidentalmente en el baúl del carro que él conduce. La ingenuidad e inconciencia que esconde detrás de su vanidad, y su carisma, serán las únicas cualidades que lo ayudaran a resolver el enigma, probar su inocencia y conservar el amor de la Sargento Fanny a quien le ha robado el corazón a pesar de su torpeza, y de si mismo. Porque en eta historia se demuestra que de eso tan bueno no dan tanto.

La historia es protagonizada por Andrés Parra, Verónica Orozco, Jimmy Vásquez, Carolina Acevedo, Gustavo Ángel, Felipe Botero, Rodrigo Candamil, Daniel Rocha, Fabio Rubiano, Víctor Hugo Morant y Katherine Vélez.